Este Blanc de Blancs Extra Brut expresa las características propias del año de cosecha predominante que lo compone, el año 2019, soleado y cálido, y permanece fiel al estilo de la Casa desarrollado por el Chef de Caves, una verdadera oda al Chardonnay De este modo, Etienne Eteneau ha puesto un cuidado especial en la creación de una cuvée selectiva que explora el Chardonnay, la emblemática cepa de la Casa, para elaborar un Blanc de Blancs Extra Brut. Un trabajo manual técnico de piquetage la convierte en una pieza única. Esta obra minuciosa implica un gesto de 12 poignettages cada tres meses, lo que favorece la autólisis de las levaduras en la botella. Estos intercambios repetidos y dinámicos alimentan al vino en aromática, le proporcionan una riqueza incomparable y una burbuja de una finura excepcional.
100 % Chardonnay
4 años en las cavas de tiza
Dominante golosa en la primera impresión (vainilla, almendra, brioche, pera y anís), seguida de manera pronunciada por notas de flores blancas. Algunos aromas tostados surgen a medida que el vino se desenvuelve en la copa, garantizando una madurez excepcional.
Ataque franco y tenso donde el Chardonnay se despliega y se funde en una boca más amplia y envolvente, adquirida gracias a las interacciones entre el vino y las levaduras amplificadas por el trabajo de poignettage. Las primeras notas de albaricoque se expresan. Notas de granada y pasas de Corinto se expresan. El final es largo y aromático (brioche tostada) y culmina con una mineralidad vivificante que deja el paladar limpio y refrescado.
Vestidura de un dorado brillante y luminoso, con destellos plateados. Las burbujas son suntuosas y giran para formar un cordón vivo y elegante. Muy hermosa espuma cremosa.
Se combina maravillosamente con los productos del mar más finos, como la vieira y la langostina.
Perfecto también para una degustación acompañada de parmesano. En cuanto a lo dulce, puedes combinarlo con peras o incluso con almendras.
Imaginar un champagne es ante todo un arte: el de coleccionar parcelas de viñedos únicas. Fiel a la visión de sus fundadores, Abelé 1757 selecciona las que tienen un potencial aromático más que prometedor.
Para garantizar un suministro constante de la más alta calidad, Abelé 1757 ha establecido estrechos vínculos con un pequeño círculo de viticultores apasionados.
Enamorados de su tierra, estos orfebres practican desde hace tiempo una viticultura respetuosa con la naturaleza en parcelas a veces tan grandes como jardines.
Precioso eco del paso del tiempo, Abelé 1757 es una de las mejores referencias en Champagne. Fiel a la filosofía de sus fundadores, saca el máximo provecho del paso del tiempo y de la materia para conferirles su forma y sabor.
Fábrica de grandes vinos de Champagne, esta Maison construye con su artesanía un puente entre el presente y el futuro. Un trabajo de orfebrería que se plasma a la perfección en creaciones marcadas por la delicadeza y la precisión.